Establecer la residencia fiscal en Francia es un paso importante para aquellos ciudadanos españoles que desean vivir y trabajar en el país vecino. A continuación, te proporcionamos información clave sobre cómo se determina la residencia fiscal y qué implica este estatus.
Criterios de Residencia Fiscal
El primero de estos criterios es la permanencia física. En Francia, se considera que una persona tiene residencia fiscal cuando pasa más de 183 días en el país durante el año natural. Estos días no tienen que ser consecutivos, pero deben sumar un total de al menos 183 días en el año.
Otra forma de establecer la residencia fiscal es si el domicilio principal se encuentra en Francia. Esto se refiere a la ubicación de la vivienda habitual y donde el ciudadano pasa la mayoría de su tiempo.
También se puede considerar residente fiscal a alguien que tiene sus intereses económicos principales en Francia, como ingresos, inversiones, o actividades profesionales.
Implicaciones de la Residencia Fiscal en Francia
Los residentes fiscales en Francia están obligados a declarar sus ingresos y patrimonio en el país. Esto incluye los ingresos obtenidos tanto en Francia como en el extranjero.
Además, como residente fiscal, está sujeto a las leyes fiscales francesas, lo que significa que pagará impuestos sobre sus ingresos de acuerdo con la escala de impuestos vigente en Francia.
Hay que recordar que Francia tiene acuerdos de doble imposición con varios países, incluida España. Estos acuerdos pueden ayudar a evitar la doble tributación y pueden ser útiles para planificar su situación fiscal.
Planificación fiscal
Por todo ello, es importante buscar asesoramiento fiscal de un experto en derecho fiscal internacional antes de establecer si residencia fiscal en Francia. Un despacho profesional, como Servigest Barberan, puede ayudarle a optimizar su situación fiscal y comprender las implicaciones profesionales.
El despacho profesional, con oficinas en Puigcerdà y la Seu d’Urgell, ofrece un servicio exclusivo y personalizado de asesoría y consultoría, para desarrollar las gestiones y trámites a ambos lados de la frontera.